Residentes del municipio capital del estado Monagas, Maturín; hacen de «tripas corazón» para adquirir los alimentos de la canasta alimentaria, que según el último sondeo de Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas-FVM), se necesitan más de 118 salarios mínimos.
El equipo de El Periódico de Monagas, consultó con los residentes de la llamada “Ciudad Distinta», para saber cómo hacen para llevar los alimentos a sus hogares, en estos tiempos tan complejos económicamente para muchos de los ciudadanos del país.
Laura Castellanos, habitante del sector El Silencio, indicó que los habitantes de los sectores populares de Maturín, «deben hacer maravillas para medio comer».
“La situación día a día es mucho más difícil para todos los que dependemos de un sueldo mínimo, los precios de los alimentos suben cada día, y es imposible cumplir con un menú balanceado, si no tenemos para comprar la carne, lo cambiamos por huevo, salchicha, queso o el que sea más económico, pero es imposible alimentarse bien en este país”.
Del mismo modo en un recorrido realizado en el Mercado Viejo de Maturín, los encuestados aseguraron que tratan de resolver, porque el sueldo mínimo de 130 bolívares, no les alcanza para mucho.
Maigualida Vásquez, una mujer pensionada del seguro social destacó que «el dinero que cobró no me alcanza para mucho, los adultos mayores tenemos que ver entre comprar comida, medicina y cosas del aseo personal. Con lo que me pagan no puedo comprar ni siquiera un pollo, así que no tengo un menú fijo de alimentos, la vida de los viejitos es mucho más dura”.
Durante el sondeo en dos de los principales mercados de ventas de alimentos en el municipio Maturín, los residentes y vendedores indicaron que tanto las hortalizas como las frutas y otros víveres han ido en aumento con el pasar de los días.
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