Dos semanas sin el vital líquido lleva el sector de Campus Udo, ubicado en la parroquia Jusepin.
La última bomba fue instalada hace tres meses y ya dejó de funcionar debido a que no le hacen mantenimiento.
Los habitantes tienen que buscar agua a otros sectores para el consumo diario y a muchas personas se les hace muy difícil trasladarse hasta otro sector ya que trabajan.
El pueblo petrolero se encuentra en total abandono por parte de las autoridades, aseguran los entrevistados, falta de alumbrado público, inseguridad y sin garantía de empleo.
Los lugareños ya están cansados y esperan una pronta respuesta de las autoridades correspondientes.
Katherine Canelón/Pasante