Ir al podólogo no sólo sirve para mostrar unos pies bonitos. Es, en cambio, para mantener una parte de tu cuerpo en total salud: los pies. Y, al fin y al cabo, son los pies quienes que te sostienen para andar a todos lados. Por tanto, deben recibir el cuidado que se merecen.El especialista de los piesNo todos están preparados en atender debidamente a tus pies. Un podólogo es el único profesional sanitario instruido, entrenado y formado, con el objetivo de ocuparse de la salud de los pies de la población. Para ello diagnostica, trata, previene y educa al público acerca de sus afecciones y deformidades.La podología como ciencia, y el podólogo como facultativo especialista de dicha ciencia, trata a personas de todas las edades, condiciones y enfermedades propias del pie.Acudir al podólogo, en ocasiones, pasa como una revisión sanitaria que no se le otorga la importancia que realmente tiene para tratar las distintas afecciones y deformidades del pie que pueden presentarse a cualquier edad.Para diagnosticar una enfermedad utiliza Rx, resonancias, TAC, pruebas de laboratorio, entre otros. En el pie se pueden manifestar enfermedades como artritis, gota, problemas circulatorios, así como otras patologías sistémicas, para las cuales un diagnóstico a tiempo resulta primordial.Cuando el podólogo detecta padecimientos que se salen del ámbito de su especialidad, colabora con otros profesionales de la medicina