Familiares de los difuntos supuestamente cremados en el cementerio municipal de Maturín exigen pruebas al respecto luego que se diera a conocer un tenebroso trabajo que presuntamente hacían los trabajadores del crematorio en el Campo SantoAníbal Guaimare, hijo de Aníbal Guaimare Díaz, señaló que las cenizas de su padre fueron entregadas un día después que cancelara el pago de 120 dólares por la cremación. “Mi padre murió el 16 de diciembre debido a un paro respiratorio y al día siguiente llevé su cuerpo al cementerio para que lo incineran, todo eso fue un protocolo, que cumplimos a cabalidad y que nos permitió al día siguiente recibir lo que según eran las cenizas de nuestro padre”, argumentó. MIRA TAMBIÉN Mientras tomaban ron GNB asesinó joven en Santa Inés MIRA TAMBIÉN Mientras tomaban ron GNB asesinó joven en Santa Inés Añadió “cuando llegué al camposanto, mi nombre fue lo primero que preguntó la secretaria y cuando se lo confirmé me pidió el dinero. Luego de eso, tomaron el cadáver de mi padre y lo llevaron a la sala para cremados y en ningún momento me dejaron entrar al lugar, cosa que tengo entendido solía ocurrir en tiempos anteriores”.Guaimare mencionó que al cabo de las horas, el encargado del lugar salió y al ser cuestionado respondió que la cremación tardaría “pues se había ido