Encomendándose a Dios, este viernes 7 de mayo, familiares de las nueve personas desaparecidas tras el naufragio en las costas de Delta Amacuro, emprendieron búsquedas particulares.
A las labores de rastreos independiente se han sumado pescadores, amigos, vecinos y empresarios de la zona. La primera embarcación salió desde el caño de La Horqueta de Tucupita, rumbo al sitio donde zozobró la balsa y playas remotas.
Ya han transcurrido 17 días y no han dado con alguna pista de las víctimas desaparecidas en altamar. Entre el grupo se encuentra Miguel Ángel Coa González, oriundo de La Toscana, municipio Piar (Monagas).
El piareño tenía intenciones de reencontrase con uno de sus hermanos en Trinidad, pero la tragedia limitó este cometido, apagando también la vida de dos mujeres de Maturín
El bote se siniestró la noche del jueves 22 de abril en la franja de agua de Boca de Serpiente, zona noreste del Delta y Sur de Güiria.