La tarde del martes 14 de septiembre, un detenido en los calabozos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) Maturín fue asesinado por sus propios compañeros de celda.
Tras producirse una situación irregular en los retenes de detención preventiva, un grupo de presos acabó con la existencia de Isaac José Rivas, de 33 años, de una brutal golpiza.
El fallecido estaba a la orden la Fiscalía de Ministerio Público, reseña una minuta del caso.
Rivas sufrió politraumatismo severo y su cadáver fue trasladado hasta la unidad de anatomía patológica del Hospital Central Manuel Núñez Tovar, para la respectiva autopsia.
Un hecho como este no ocurría desde principio de marzo, cuando en los mismos calabozos de la Delegación Municipal Maturín golpearon hasta dejar sin vida a un hombre que resultó tras las rejas por golpear a sus hijos y amarrarlos a un árbol para que fueran picados por hormigas.