La celebración del Día de Reyes es un evento religioso que representa la adoración de Jesucristo. Así mismo, se acostumbra dar obsequios como “representación” de las ofrendas que los tres Reyes Magos llevaron a Jesús de Nazareth.
La creencia en los Reyes Magos tiene su origen en Mateo 2:1:12, donde se cuenta cómo Gaspar, Melchor y Baltazar le preguntaron al rey Herodes por el “Rey de los Judíos” que acababa de nacer.
“Nacido Jesús en Belén de Judea, en tiempo del rey Herodes, unos magos que venían del Oriente se presentaron en Jerusalén diciendo: ¿Dónde está el Rey de los judíos que ha nacido? Pues vimos su estrella en el Oriente y hemos venido a adorarle”, reza el evangelio.
Herodes pidió a los Reyes Magos que buscasen y encontraran al recién nacido; sin embargo, luego de una revelación en sueños, ellos burlaron al emperador y tomaron otro camino para encontrarse con el Mesías.
Apenas llegaron a Jerusalén “entraron en la casa, encontraron al niño con maría, su madre y postrándose, lo adoraron; luego, abrieron sus tesoros, le ofrecieron presentes: oro, incienso y mirra”.
Desde 1866, para honrar su creencia católica, comenzó a dar regalos a los niños la noche del Día de Reyes; tiempo después esta cultura se extendió por América y fue adoptada por los países de habla hispana por países como Venezuela, donde se acostumbra adorar al Niño Jesús y cenar La Rosca de Reyes.