Decenas de personas llegaron este viernes a la fuertemente resguardada frontera entre México y Estados Unidos, en el día en que Washington anunció que en agosto se batió el récord de cruces de migrantes de este año.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza informó de 232.972 cruces de migrantes en la frontera sur en agosto. Desde principios del año fiscal en octubre, la cifra supera los 2,2 millones.
En Eagle Pass, Texas, migrantes provenientes de países como Honduras y Venezuela cruzaron el Río Grande que separa a Estados Unidos y México. Esto para encontrarse con una casi infranqueable pared de alambre de púas que les impedía entrar en territorio estadounidense y entregarse a las autoridades.
«Estoy alegre porque estoy a un paso», dijo Noe Zelaya, un hondureño que junto a su esposa y dos hijos de 12 y 5 años se deparó con la maraña de alambres. «Pero estoy triste porque no podemos pasar», comentó el hombre mientras su esposa Belkys Cruz, de 33 años, pedía ayuda a militares estadounidenses apostados en el lugar.
Vía El Nacional