Marcelo Rebelo de Sousa, presidente de Portugal, entregó este viernes ante el Tribunal Constitucional la recién aprobada ley de despenalización de la eutanasia para su posterior revisión.
Esto al considerar que existen bases en la medida que contiene «conceptos excesivamente indeterminados», según reseñan medios internacionales.
Mediante un comunicado en la página oficial de la Presidencia de Portugal, el conservador no esta de acuerdo en la «definición de los requisitos de permiso de la despenalización de la muerte médicamente asistida».
Fue el pasado 29 de enero cuando el Parlamento aprobó la despenalización de la eutanasia en casos de mayores de edad, sin enfermedades mentales, en situación de sufrimiento «duradero e insoportable» y con «lesión definitiva de gravedad extrema» o «enfermedad incurable y fatal».
El diario El Luchador explicó en su reseña que parte de estos conceptos pusieron en duda a Rebelo de Sousa, católico confeso, aunque “nunca llegó a revelar su posición sobre la eutanasia pero que aseguró que sus convicciones personales no determinan sus decisiones a la hora de promulgar o no una ley”.
Dichas interpretaciones, según expresa el presidente en el escrito al Constitucional, le dan prioridad a los profesionales médicos para que practiquen la eutanasia en el mencionado grupo etario. «Esto crea una situación de inseguridad jurídica que habría que evitar en una materia tan sensible», agrega el texto.
El Constitucional deberá ahora revisar la norma y valorar si alguno de sus artículos supone una violación de los derechos y principios recogidos en la Carta Magna.
Es la segunda vez que Rebelo de Sousa remite una ley al Constitucional desde que asumió la jefatura de Estado, en 2016.