Lo que podrían ser los restos del submarino de la Marina de Indonesia desaparecido desde el pasado miércoles fueron localizados cerca de la isla de Ball, última posición reportada por la nave, en la que se encontraban 53 tripulantes.
El hallazgo se produjo en un radio de 16 kilómetros del punto donde fue ubicada la unidad militar antes de que se perdiera todo contacto con el KRI Nanggala (clase Chakra) , informó este sábado 234 de abril el jefe del Estado Mayor de la Armada indonesia, Yudo Margono, durante una conferencia de prensa.
Entre los restos encontrados se cuentan esponjas resistentes al calor, alfombras de oración (la mayoría de los tripulantes eran musulmanes) y lubricante para periscopios, detalló el declarante, quien agregó que los investigadores consideran que, en efecto, estas pruebas “proceden del Nanggala”, por lo que lo han declarado oficialmente hundido.
La autoridad militar explicó que la localización de los restos del submarino fue posible gracias al uso de un escáner, que lo ubico a 850 metros de profundidad, ”mucho más allá de los límites de supervivencia humana”.
Al momento del siniestro, la nave, diseñada para alcanzar una profundidad de 500 metros, se preparaba para un simulacro de torpedeo.