Tras ganar la presidencia de Ecuador en los comicios del pasado domingo, el político centroderechista, Guillermo Lasso, declaró a la prensa extranjera que trabajará por lograr una “regulación más amplia” para los venezolanos residenciados en su país.
El Impulso reseñó en su portal de noticias que el recién electo mandatario de Ecuador afirmó que buscará ser “coherente” a la hora de pedir un trato igualitario para los ecuatorianos en el extranjero.
“Las políticas migratorias tienen doble vía: defender a los ecuatorianos en países como EEUU, en Europa, España, Italia, pero a la vez también actuar humanitariamente con los venezolanos que han llegado a Ecuador”, explicó.
La ayuda migratoria beneficiaría en primera instancia a unos 400.000 de los más de 1,7 millones que llegaron al país andino desde 2016, la gran mayoría aún sin un estatus regularizado.
Además, en algunos casos han aflorado todo tipo de problemas de racismo debido a su condición y a la falta de trabajo en momentos de crisis.
Para Lasso, la migración venezolana es equiparable a la de los ecuatorianos que abandonaron el país en distintos momentos de la turbulenta historia económica, política y social de Ecuador, por lo que insistió en una dosis de «coherencia» al abordar el tema.
“No podemos ser tan incoherentes de pedir un buen trato para los ecuatorianos que viven en el exterior y maltratar a los extranjeros que viven en Ecuador. Tenemos que ser coherentes y consecuentes, esto es doble vía y en el caso de venezolanos trabajaremos de cerca con las Naciones Unidas”, apuntó al hablar de un encuentro internacional en junio en el que hará sus planteamientos.