El problema con la falta de agua en los sectores Palo Negro y La Manga parece no tener fin, pero en los últimos cuatro años se ha acentuado la escasez. Muchos deben caminar incluso hasta el llenadero de la planta potabilizadora del Bajo Guarapiche.
Quienes viven el Palo Negro manifiestan que el agua llega cada tres o cuatro día, sin embargo no es constante porque puede tardar más tiempo. En una de las calles, se puede observar a vecinos llenando sus recipientes de una toma de medidor ubicada en una acera.
Marcos Camino vecino de la zona, manifestó que ni con una bomba se logra que llegue el recurso hídrico a las casas por lo que dependen de cisternas o por el contrario tienen que caminar hasta el tanque de La Manga e incluso para la planta potabilizadora.
Reiteran su llamado a las autoridades de Aguas de Monagas para que atiendan prontamente la falla de raíz que impide que llegue agua a las casas de ambos sectores.