Transitar por la avenida Miranda de la capital monaguense a pie o en carro se ha tornado una verdadera odisea para quienes con frecuencia se ven en la necesidad de utilizar esa arteria vial.
Las aceras se encuentran llenas de banderines y letreros publicitarios de las diferentes tiendas que ofrecen bienes y servicios, mientras que el pavimento poco a poco ha sido tomado por comerciantes informales.
A pesar que esta importante avenida es un “corredor vial”, es notorio observar la cantidad de vehículos estacionados durante todo el día, lo que disminuye el espacio para la mejor circulación.
Debido a la saturación que se ha generado en esta arteria vial de cuatro canales (dos de ida y dos de vuelta), aunado a la falta de semáforos; choferes de las diferentes líneas de trasporte que hacen vida en la zona aseguran que se pierde mucho tiempo.
Vale la pena resaltar que la avenida Miranda inicia en el cruce con la avenida Rojas y culmina en los módulos habitaciones del sector Los Bloques, siendo el tramo más concurrido el correspondiente desde la avenida Bolívar hasta la prolongación Miranda, a la altura de un reconocido supermercado.
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