Una de las principales arterias viales de Maturín, es la avenida Juncal, conocida también por ser el termómetro político del estado en tiempos de campañas electorales y una de las avenidas más largas de la ciudad.
Actualmente se encuentra convertida en un “terminal improvisado” de pasajeros sin ningún tipo de control debido a que en sus inmediaciones se sitúan más de 13 paradas de buses y carritos por puesto con destino hacia sectores, municipios e incluso a otras ciudades del país.
San Santonio de Cayacuar, Aragua de Maturín, Caripito, Quiriquire, Caripe, Tipuro, Boquerón, Caicara, entre otros, son los destinos más ofrecidos, lo que ha convertido a esta arteria vial en un sitio de embarque y desembarque obligatorio a cualquier hora del día.
También es común escuchar a los fiscales de las paradas anunciar destinos como San Félix, en el estado Bolívar y El Tigre, en el estado Anzoátegui, a pesar que en la ciudad distinta existe un terminal en el cual se ofrecen estos destinos.
Durante las horas pico se evidencia gran cantidad de personas en la avenida, específicamente en el tramo comprendido desde la calle Monagas hasta el llamado Banquiao, esperando su turno para abordar la unidad automotor.
Según se pudo conocer, por voz de los choferes, estas paradas están situadas en el referido espacio para ofrecer comodidad a los viajeros y “evitarse” llegar hasta el referido puerto terrestre, sin embargo, la mayoría de estas paradas carecen de techo o toldo que resguarden a los pasajeros del sol o la lluvia.
“Desde acá salimos directo y no tenemos que dar una vuelta innecesaria por la avenida Cruz Peraza, que es la más accesible para dirigirnos a la zona norte, a lo largo de la avenida existen líneas cooperativas de transporte, las privadas cuentan con oficina”, acotó Luis José Meneses, chofer de la línea San Antonio.
Es de recordar que desde el ayuntamiento municipal se adelanta un plan de reordenamiento vial que contempla la reubicación de todas estas paradas a fin de descongestionar las calles y avenidas de la ciudad de Maturín.