La inseguridad ha sido el “talón de Aquiles” en el estado Monagas, cobrando tanta fuerza en los últimos años que ha posicionado a la entidad entre los estados más violentos del país.
Según un estudio realizado por el Observatorio Venezolano de Violencia en Monagas (OVV Monagas), publicado en el 2022, los municipios con mayor índice de violencia son Maturín, Piar y Ezequiel Zamora.
En la publicación se puede leer que el municipio Maturín, concentra el 73,41 %; seguido de Ezequiel Zamora, con 6,65 %; y Piar, con 4,99 %, que a pesar de ser un número bajo, es muy alto estadísticamente para la cantidad poblacional que alberga en el territorio.
Los delitos van desde homicidios intencionales y tentativa de homicidios, hasta robos, amenazas de muertes y agresiones graves o leves lo hace presumir que los delitos son cometidos por pandillas y bandas delictivas que operan intermunicipalmente.
La capital de Monagas concentra el mayor porcentaje de violencia de acuerdo a los delitos que se producen. El robo representa el 29,43 %, el homicidio intencional el 26,79 % y la tentativa de homicidios intencional el 23,02 %. Maturín concentra el 60 % de la población del estado y posee un importante número de bandas dedicadas a todo tipo de delito, sin embargo, se presume que algunos de estos grupos pueden proceder de los municipios periféricos.
En el municipio Ezequiel Zamora, los homicidios intencionales poseen 33,33 %, los robos 25 % y las agresiones el 20,83 %. En este Territorio coexisten bandas de vieja data, que siguen procurando el provecho ilícito con pandillas más recientes. En ocasiones se producen enfrentamientos y ajustes de cuentas entre éstas. Adicionalmente, muchos de los delitos de hurtos y robos de material estratégico -hierro y tuberías- han sido detectados en esta zona.
En Piar, el patrón de ruralización de la violencia sigue vigente. Allí se observaron delitos como homicidios intencionales 33,33 %, intentos de homicidios intencionales 22,22 % y robo 27,78 %, con algunos casos de agresiones graves o leves 5,56 %.
La pobreza, la marginación, bajos niveles de calidad de vida y pocas expectativas sobre un futuro mejor, son los principales factores estructurales de la violencia instalada en los tres municipios.
En el informe, el OVV añadió que la falta de articulación con las autoridades nacionales y regionales, así como la ausencia de transporte para efectuar patrullajes, acompañado por la detención a tiempo de los delincuentes, ha traído como consecuencia el desenfreno de la delincuencia.
El equipo encargado de llevar a cabo el estudio de la situación y la publicación del informe recomendó articular los trabajos de los cuerpos de seguridad ciudadana, tanto de policías municipales, estatales como nacionales, desarrollar políticas de seguridad sistemáticas, estructuradas de la mano de la participación de los habitantes de las poblaciones afectadas y de las parroquias del municipio Maturín, de tal forma que incida positivamente en la disminución progresiva de la violencia en el eje que conforman estos tres municipios.
Información con datos aportados por la OVV Monagas