Las fallas eléctricas se han vuelto más constantes en el centro de Maturín donde a diario se registran dos y tres apagones.
La situación se hace más frecuente después que llueve y con ello trae como consecuencia la caída de las señales de datos de las operadoras de telefonía, lo que obviamente afecta los puntos de venta y biopago.
Ciudadanos denuncian que se quedan incomunicados ya que no pueden hacer llamadas ni enviar mensajes de texto. Critican la falta de información oficial por parte de Corpoelec o de las autoridades gubernamentales.