Como cada 15 de enero, los maestros en Venezuela suelen celebrar su día, sin embargo, desde hace unos años, esa celebración pasó a sólo ser una simple conmemoración y que es los docentes afirman que hoy día no hay nada que festejar.
Salarios que califican de miseria, pésimas condiciones laborales, beneficios socioeconómicos insuficientes, son alguna de las limitaciones que tienen actualmente los docentes, que vista la situación se han visto obligados a “matar tigres”.
Odalys Level, secretaria general de la Federación Venezolana de Maestros, reiteró que no hay motivos para celebrar porque la situación salarial es “paupérrima”.
“¿Cómo puede uno celebrar este día cuando lo que percibimos son salarios son de miseria?, en ninguna clínica reciben a un maestro porque el seguro no alcanza para nada”, expresó Level.
Familia de educadores
En el núcleo familiar, López-Bermúdez, tres de sus integrantes eligieron ser profesores, aunque dos de ellos ya están jubilados, no quisieron dejar pasar esta fecha para al menos recordar lo que anteriormente significaba.
– Bertha Bermúdez de López jubilada con 40 años de servicio cuenta que ya el Día del Maestro dejó de ser hace mucho tiempo lo que antes era, una verdadera celebración, donde era un orgullo decir que se era educador.
-Emilio López quien se desempeñó por más de 30 años en las aulas, desea que pronto la situación de los maestros y jubilados pueda mejorar y que vuelva a ser como antes donde los profesionales de la educación podían vivir dignamente.
– Ana Victoria López, hija de Bertha y Emilio aspira que las cosas cambien para bien de la educación de Venezuela, ya que asegura que sin maestros no hay país.