Transportistas de diferentes rutas urbanas de Maturín han expresado su desacuerdo con la posible implementación en el cobro del pasaje electrónico. No obstante han manifestado su desconfianza con este nuevo método de pago.
La poca información que se tiene al respecto con el sistema digital que estaría próximamente en vigencia según autoridades, ha hecho que los choferes lo vean con recelo. La preocupación de los trabajadores del volante es cómo mantener sus unidades en especial con la hiperinflación actual.
“Todavía no sabemos cómo vamos a cobrar, cuando uno necesite comprar un repuesto, un caucho o una batería, en qué tiempo se hará efectivo eso. Estamos en un país donde a diario aumentan los precios de todo, se nos hará complicado el mantenimiento de los vehículos”, dijo José Luis Hernández, uno de los consultados.
En este sentido, recordaron que no es la primera vez que se impone este tipo de pagos, ya que con Transmonagas se aplicó con las tarjetas inteligentes, pero que aseguran no funcionó a pesar de ser una flota de autobuses pequeña.
“Esto puede funcionar, pero en rutas largas, para el transporte urbano muy difícil que resulte, porque si la tarjeta no pasa el sistema está lento, se va a demorar uno más”, señaló Hernández.