Nadie sabe lo que hay detrás de cada medalla o título que conquista un deportista. El círculo se podría resumir a su entorno familiar más cercano y el entrenador. Mucho sacrificio, sudor y hasta lágrimas derraman los jóvenes que han dedicado su vida al deporte.
Entre los sacrificios y obstáculos que deben afrontar está el entrenar en condiciones que no son las adecuadas y que en ocasiones pudieran generar lesiones con consecuencias graves. Esa es la realidad a la que se enfrentan quienes día a día practican las diferentes disciplinas del atletismo en el Complejo Polideportivo de la ciudad de Maturín.
La pista de carrera no posee las mejores condiciones, desde el año 1981 cuando fue instalado el tartán (piso a base de corcho) no ha recibido ningún mantenimiento. El recubierto está totalmente agrietado y en partes de su longitud, es inexistente.
El desnivel también representa un problema. En ocasiones varios de los atletas se han doblado el pie al caer en uno de estos baches impidiendo la continuidad de su preparación física durante meses.
Para el profesor Ramón Naranjo, instructor de atletismo en la modalidad de carrera de velocidad y de resistencia, hace falta interés por mejorar las condiciones de las instalaciones, “es entendible que el presidente del Instituto de Deporte se sienta de manos atadas al no poseer los recursos, pero también es necesario que las autoridades de todos los niveles se aboquen a recuperar estar instalaciones que, en su momento fueron de primer nivel”.
Quienes practican el lanzamiento de martillo, lo hacen con la mirada puesta en la llamada jaula de tiro y no precisamente porque deben calcular la distancia para ejecutar el movimiento. La estructura metálica esta oxidada por donde se le mire y amenaza por caerse en cualquier momento.
Los deportistas aseguran sentir miedo, “cuando pega mucha brisa la jaula se mueve y parece que se va caer, es necesario reforzarla; aunque la verdad lo que se requiere es cambiarla”.
Una de las peores partes se las llevan los atletas de lanzamiento de disco, no existe una estructura de tiro. Cuatro palos con una cinta de seguridad en colores amarillo y negro es lo que usan como referencia y simulación de la caja de lanzamiento. Las líneas perimetrales son señaladas en muchas ocasiones con hilos pabilos o algún tipo de mecate.
Los implementos deportivos ameritan ser cambiados urgentemente y ser adaptados a las exigencias deportivas de alto nivel y rendimiento. Muchos de los jóvenes deportistas entrenan con discos, balas, jabalinas, martillos y vallas que datan desde hace unos cuantos años.
A partir de las 5:30pm los deportistas empiezan a desocupar las instalaciones de la pista de atletismo del polideportivo de la capital monaguense, por lo que el entrenamiento no pasa más de hora de hora y media; siempre y cuando no llueva.
Las torres de iluminación no poseen lámparas, no existen grifos para hidratarse, los baños se encuentran fuera de servicio debido a las pésimas condiciones en las que se encuentran, algunos se han usado como basurero e incluso hotel de paso, en las gradas el techo se ha desprendido y las columnas se muestran algo oxidadas. La grama del terreno tampoco es la ideal, en la actualidad lo que existe es monte o paja.
El sueldo de los profesores no pasa más allá de los 20 bolívares mensuales, algunos viven en zonas alejadas del referido centro deportivo y en ocasiones deben “echar patica” para ahorrar la mensualidad
Ottaynis Febres, con solo 15 años de edad y cuatro meses de práctica en lanzamiento de disco se tituló subcampeona nacional en los pasados Juegos Deportivos Juveniles 2022. Conquistó la medalla de plata al alcanzar una distancia de 28 metros con 32 centímetro. Según su entrenador, pudo ser medalla de oro, sin embargo, un error en uno de sus movimientos le quitó la presea dorada.
La espigada morena, aparte del deporte, se vio obligada a trabajar limpiando casas de familias y vendiendo boletos. “Vivo solamente con mi abuela y la realidad me obligó a salir a trabajar, es una lástima que como atletas no contemos con el apoyo de las instituciones que se vanaglorian y se llevan los lauros cuando nosotros logramos las medallas”.
Febres destacó que, tras su triunfo no recibió más allá de felicitaciones, “no tenemos beca, no tenemos un apoyo que nos permita seguir practicando deporte, lo que recibimos fue el uniforme para representar al estado, que, por cierto, los zapatos ya están rotos y los juegos fueron hace dos semanas”.