Desde el descubrimiento del Covid-19 y su posterior expansión los gobiernos y las diversas instituciones han trabajado sin descanso para controlar la situación lo mejor posible. Diversas pruebas, vacunas y diferentes medidas de seguridad, y por supuesto la cuarentena que cuya dinámica ha dependido enteramente de cada país.
Hasta hace poco solo se contaba con dos métodos para la detección del Covid-19; las pruebas de antígenos, que pueden ser nasofaríngea o de saliva, y las PCR. Sin embargo, investigadores de diferentes partes del mundo han creado pruebas más “sencillas” y baratas.
Investigadores estadounidenses de la Universidad de California han llegado a un gran descubrimiento; un test que funciona a través del teléfono móvil que es capaz de detectar el Covid-19.
El hallazgo fue publicado en el Journal of the American Medical Association (JAMA), y funciona gracias a la amplificación isotérmica mediada por bucle (LAMP, por sus siglas en inglés) y se trata de una técnica de amplificación de ADN, cuyo costo no es mucho y el cual es bastante común en la biología molecular para el diagnóstico de ciertas enfermedades.
Esta nueva versión del kit está compuesto por una placa caliente, una caja de cartón y luces led. El usuario por su parte ha de depositar una muestra de su saliva en la placa y este cambiará el color de luces led según el resultado, el cual se escaneará (la placa) y en un periodo de 25 minutos se establecerá si es positivo o negativo.
El test ha sido probado en 50 muestras demostrando una concordancia del 100% de efectividad al ser comparado con pruebas de PCR. Además, de resultar económico también puede llegar a analizar hasta 96 muestras de saliva y permite actualizarse de acuerdo a las nuevas variantes.
Los investigadores de la Universidad de Pensilvania han logrado crear tres sistemas para detectar el Covid-19, siendo el último desarrollado para ser usado junto a teléfonos inteligentes.
“Hemos desarrollado un total de tres prototipos para teléfonos inteligentes”, explica César De la Fuente, biotecnólogo del equipo a cargo de la creación de los test “Los dos primeros usan electroquímica para detectar el virus”.
El sistema funciona con un chip, conectado por un potenciostato a un ordenador o teléfono inteligente en el cual se deposita una muestra de fluido (de boca o nariz) y mediante reacción electroquímica, a través de la proteína S, se identifica si las células han logrado entrar al organismo.
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